Nuestro último gran descubrimiento. ¿Cómo no habíamos probado antes esta crema? Ahora mismo, y a pesar de todas las cremas fabulosas que puedes encontrar en el mercado, ésta es nuestra favorita en la gama de las regenerantes para el cuerpo, con efecto tensor inmediato y con una textura que te deja la piel suave, agradable y con una increíble sensación de que está perfectamente hidratada (a veces cuesta conseguirlo cuando ya se inicia la temporada de verano, ¿verdad?). Esa sensación la aportan principalmente la manteca de karité y el aceite de jojoba, dos ingredientes que seguro que conoces y que se encuentran entre los más nutritivos y de mejores resultados de cuantos usan las marcas de perfumería y cosmética.
Pero, además, esta crema blanca como la nieve, de agradable tacto y suave olor, contiene extracto de tomillo limón (una variedad de tomillo, claro), una innovación de Clarins que favorece la síntesis de la Emilin (una proteína que refuerza y protege las fibras elásticas de la piel). Con la ayuda de este compuesto, te aseguramos que la piel recobra flexibilidad y elasticidad. Es especialmente recomendable en muslos, vientre, busto y la parte interna de los brazos.
El extracto de tomillo limón se combina con extractos de centella y de bocoa; ésta última planta es el 'palo de hierro' de la selva de la Guayana, descubierto por Clarins en un viaje de uno de sus etnobotánicos, que escuchó relatar sus virtudes a indígenas Saramaca. En las tribus, se usa esta planta, con la decocción de hojas y madera, en lo que llaman el 'baño de fortaleza', un ritual para recuperar energía.
Ya ves que Clarins, para preparar sus cremas, recorre el mundo en busca de las plantas más adecuadas. Te garantizan que respetan el medio ambiente y que no experimentan con animales. También es bueno saberlo.
Y tu piel, como nosotr@s hemos comprobado con sumo placer, adquiere un aspecto tonificado, fuerte, flexible... El cuerpo está más hidratado y más definido. Una gran crema, sin duda.
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